- Los recortes sociales anunciados por Zapatero suponen una importante quiebra de confianza.
La Comisión Ejecutiva Confederal (CEC) de UGT, reunida hoy en sesión extraordinaria, ratifica su oposición y rechazo a las medidas de recorte social anunciadas por el Presidente del Gobierno, Jose Luis Rodríguez Zapatero, porque además de castigar a 9 millones de familias trabajadoras no reducirán el paro y ralentizarán la recuperación económica. Estas medidas entorpecen el diálogo social, rompen el consenso parlamentario alcanzado en el Pacto de Toledo y suponen una importante quiebra de confianza. La CEC de UGT reafirma su voluntad de alcanzar un acuerdo, en el marco del diálogo social, sobre el mercado de trabajo y espera que las medidas anunciadas por el Gobierno no obstaculicen este proceso. Asimismo, expresa su máximo apoyo a las movilizaciones convocadas por la Federación de Servicios Públicos de UGT y CCOO, que culminarán con un paro general de los empleados públicos el próximo 2 de junio, y analizará con el conjunto del sindicato y en unidad de acción con CCOO, tanto los planteamientos como una respuesta proporcionada y contundente ante estos recortes sociales.
La CEC de UGT ha ratificado hoy su rechazo tajante a las medidas anunciadas por el Presidente del Gobierno, Jose Luis Rodríguez Zapatero, que ha cedido a la presión de los mercados financieros y ha iniciado un camino de recortes sociales que sabemos donde comienza pero no se sabe donde va a acabar. El sindicato lamenta que finalmente haya prevalecido la economía financiera sobre la economía real y advierte de los riesgos de actuar al dictado de los mercados. Por lo pronto las medidas de recorte social, que afectarán a 9 millones de familias españolas, suponen una quiebra en la confianza social, no van a solucionar el paro y, además, entorpecerán la recuperación económica. Asimismo, tampoco ayudan en la marcha del diálogo social.
La reducción del 5% de los salarios de los funcionarios supone el incumplimiento flagrante del Acuerdo de la Función Pública, firmado en septiembre de 2009, cuando ya se conocía el alcance de la crisis económica y justifica una contundente respuesta social por parte de este colectivo. En este sentido, la CEC expresa su más firme apoyo a las movilizaciones anunciadas por la Federación de Servicios Públicos de UGT, conjuntamente, con la Federación de la Función Pública de CCOO, que culminará con un paro general de este colectivo el próximo 2 de junio.
Por otro lado, la congelación de las pensiones contributivas supone una ruptura del consenso parlamentario del Pacto de Toledo, vigente desde hace 15 años. Medidas sometidas al debate parlamentario y, posteriormente, al debate social que han dado un buen resultado.
La CEC reafirma su voluntad de simultanear esta situación negativa con la voluntad de alcanzar un acuerdo con la patronal, en el marco del diálogo social, sobre el mercado de trabajo y espera que este ajuste impuesto por el Gobierno no obstaculicen este proceso.
La Comisión Ejecutiva Confederal ha convocado de manera urgente el próximo lunes, 17 de mayo, el Consejo Confederal de UGT (integrado por los máximos dirigentes de las Federaciones Estatales y Uniones de Comunidad Autónoma del sindicato, además de la propia Comisión Ejecutiva Confederal) como primer paso a un debate en el conjunto de la organización de las medidas adoptadas por el Gobierno, así como la respuesta que deberá articular el sindicato, en unidad de acción con CCOO, durante las próximas semanas. El siguiente paso en este debate interno será la celebración del Comité Confederal de UGT, máximo órgano de decisión entre congresos, que tendrá lugar los días 26 y 27 de mayo en Madrid.