Aprobada la nueva estructura de la Academia de Policía del País Vasco
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A la formación policial se añaden la protección civil, la atención de emergencias y la seguridad privada
El Consejo de Gobierno ha aprobado hoy el Decreto que establece la nueva estructura interna de la Academia de Arkaute. Según se recoge en el texto del documento, el nuevo organigrama es fruto de una concepción integral de la seguridad pública, que requiere de la integración efectiva de todos los servicios destinados a proteger y ayudar a la ciudadanía, englobando junto a los recursos policiales los de emergencias y protección civil.
La Academia de Policía del País Vasco, creada en 1982, ha dedicado su trayectoria a la preparación de ertzainas y agentes de las policías locales, centrando especialmente su esfuerzo en el despliegue de la Ertzaintza. En adelante, a estos cometidos se van a sumar otros relacionados con nuevos ámbitos de la seguridad pública, fundamentalmente en el terreno de las emergencias y la protección civil. Para optimizar la capacidad interna de la Academia ante este nuevo reto el Departamento de Interior entiende que es preciso abordar la reestructuración de este centro formativo. La nueva situación va a suponer un incremento en la actividad de la Academia, al sumar nuevas tareas a las hasta ahora realizadas. A ello debe añadirse la necesidad de potenciar su papel como centro de investigación en materia de seguridad.
Según se establece en el Decreto aprobado hoy las finalidades de la Academia de Policía del País Vasco son la formación y selección del personal de los cuerpos policiales vascos, la colaboración con entidades dedicadas a la protección (especialmente en seguridad privada, atención de emergencias y protección civil), la investigación sobre seguridad y la difusión de conocimientos en materia de seguridad.
El Decreto también determina las funciones que corresponden a la Academia, que se centrarán en todos los aspectos relacionados con la gestión de los procesos selectivos para el ingreso, promoción interna y especialización tanto de la Ertzaintza como de las Policías Locales, colaborando para ello con las administraciones municipales y con todos los organismos públicos y privados que trabajan en la promoción de la seguridad.
El Decreto, por último, relaciona los órganos internos responsables de la gestión de la Academia de Arkaute, comenzando por su gobierno (Consejo Rector y Dirección), los cuadros responsables de la gestión directiva y las diferentes unidades administrativas, que incluyen divisiones especializadas en estudio y planificación, gestión académica, administración y servicios, régimen jurídico, gestión económica y asuntos generales. En el Decreto se recogen de manera pormenorizada los cometidos y las competencias de cada uno de estos órganos de la nueva estructura.
Con la aprobación de este decreto, el Departamento de Interior da un paso fundamental en la reconversión de la Academia de Arkaute en un órgano global de formación de seguridad en todas sus vertientes, incorporando al que hasta la fecha era su cometido básico, la formación policial, un amplio abanico de materias y servicios relacionados tanto con la protección civil y la atención de emergencias como con aspectos vinculados a la seguridad privada y a la protección de las personas. A ello se suma, además, una potenciación importante de la capacidad de Arkaute para la investigación e innovación en todas las materias relacionadas con la seguridad.