Los cambios introducidos por la reforma laboral se han convertido en el caballo de batalla del sector de la seguridad privada en Cantabria. Algunas empresas han avisado de la posibilidad de 'descolgarse' del convenio estatal e intentar negociar uno propio. La respuesta sindical se vio ayer a las puertas de la Delegación de Gobierno, cuando medio centenar de delegados del sector de la seguridad privada de UGT, CC OO, USO y CSIF se concentraron para exigir a las empresas el cumplimiento del actual convenio colectivo. «De lo contrario -advirtieron- habrá un gran deterioro del propio servicio de seguridad y del empleo».
Según precisó el secretario general de la Federación de Servicios (FES) de UGT en Cantabria, Justo San Millán, «no podemos aceptar que algunas empresas planteen ahora descolgarse del convenio colectivo estatal para imponer un convenio propio con condiciones laborales, sociales y económicas a la baja». «El convenio colectivo es el único marco legal de referencia que da estabilidad al sector, que garantiza unas condiciones mínimas y adecuadas a sus trabajadores y al servicio que prestan, por lo que si no se cumple se verán afectadas las propias medidas de seguridad en numerosos edificios públicos, en los bancos o en el transporte blindado», agregó San Millán.
El sindicalista rechazó que «algunas empresas no duden ahora en descolgarse del convenio colectivo porque la reforma laboral les ampara para ello y propongan sus propias condiciones alternativas con aumentos de jornada o rebajas salariales». El portavoz de UGT advirtió que «si estas empresas siguen por este camino habrá un gran conflicto social y laboral en el sector y los sindicatos tomaremos las medidas de presión necesarias».
UGT, CC OO, USO y CSIF han convocado otra concentración el día 24 de julio, a las 12 horas, frente al Museo Altamira en Santillana del Mar.