UGT de Huelva ha alertado de dos síntomas ocasionados por los recortes: por un lado, la privatización y, por otro, la pérdida de empleo en prisiones. De este modo, este sindicato ha puesto de manifiesto que va a apoyar a los compañeros de prisiones en todas sus reivindicaciones.
Marisa Fernández Santiago, secretaria general de la FSP UGT Huelva, ha expuesto “que tras estas reivindicaciones de la plantilla de prisiones se encuentra la merma de los servicios públicos, un ejemplo que está actualmente pasando en la seguridad exterior reservada, en principio, a cuerpos de la Guardia Civil. Desde el año pasado sin embargo funciona en prisiones un proyecto piloto para contratar una seguridad privada que acompañe a los guardias civiles, con lo que este servicio que “lo podrían realizar otros compañeros, lo han privatizado y hay duplicidad de funciones.” “Este proyecto piloto que empezó el año pasado, –añade Fernández– creemos que se ha realizado para que el servicio público vaya desapareciendo. Nos tememos, que en el perímetro interior, irán también poco a poco desapareciendo, como consecuencia de lo que ya se ha iniciado en el exterior”. FSP-UGT de Huelva entiende que todo esto afecta a los usuarios ya que se merma en atenciones psicológicas, sanitarias, así como la pérdida de empleos que se está sufriendo en prisiones, donde de 575 funcionarios, entre los que se encuentran funcionarios, médicos o educadores. ha habido una merma de 63 puestos y las plazas ya no se reponen.
Fernando Mohedano, secretario de Organización de FSP-UGT de Huelva en prisiones, indicó que hay “dos denuncias claras en sus reivindicaciones: la privatización que se está llevando a cabo y la merma del empleo. Recordó, por otro lado, que existe una plataforma conjunta con otros sindicatos para hacer una concentración el 30 de octubre en los aparcamientos de la prisión. Jesús González-Haba, secretario general de FSP-UGT de Huelva en prisiones, comentó que en en el centro penitenciario hay unos 1.200 presos, teniendo una capacidad para 900 y que a esto se une, “que cada vez hay menos compañeros para poder atender las unidades”.