El sindicato UGT cargó ayer contra el despido de un vigilante de seguridad de Sograndio como "único responsable" de la fuga, la semana pasada, de dos internos del centro, uno de ellos aún huido. El secretario de la Federación de Servicios de UGT, Fermín de Con y el responsable de Seguridad Privada en el sindicato, José Manuel Fernández, censuraron ayer las "vergonzosas" declaraciones del consejero de la Presidencia, Guillermo Martínez (PSOE), y del director general de Interior, José Luis Villaverde, como consecuencia de la fuga y el "desprecio a la profesionalidad de los vigilantes de seguridad del centro".
A su juicio, el despido "además de ser indigno", ha generado "un desasosiego y un malestar general" en el colectivo de vigilantes. "Muchos de ellos llevan más de veinte años trabajando en el centro de menores con absoluto rigor y en unas condiciones difíciles por la peculiaridad del centro", subrayan.
Para el sindicato, detrás de la fuga de los menores, están las "nefastas consecuencias" de la política de adjudicación de servicios de seguridad llevada a cabo por el Gobierno del Principado "basada en la oferta más barata", de la que UGT lleva tiempo advirtiendo. "Entendemos que el enrarecimiento de las relaciones laborales en este centro tras la adjudicación del servicio a Alcor Seguridad, las jornadas excesivas de trabajo, la adjudicación del servicio a una empresa que incumple el convenio colectivo del sector, la falta de medidas de autoprotección para los vigilantes y algunos otros graves incumplimientos, deberían hacer pensar un poco a los responsables de este centro de menores, antes de culpar alegremente al vigilante", señalan.
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