La decisión de Alcoa de contratar la seguridad externa con la empresa Prosegur y rescindir el contrato con Sequor ha permitido solucionar el conflicto que mantenían los 10 trabajadores de vigilancia. La decisión de la multinacional, que se mantenía al día en sus pagos a la contrata, fue reclamada por los propios afectados, que habían convocado una huelga indefinida ante futuros retrasos en el cobro de sus nóminas.
Prosegur ha asumido a los diez trabajadores, aunque ahora estos deberán litigar con Sequor para cobrar los sueldos pendientes. Sequor aún mantiene el contrato con el Oceanográfico, donde trabajan dos vigilantes de seguridad, y que no se han visto beneficiados por este cambio de contrata. De hecho, esos dos trabajadores mantienen la convocatoria de huelga.